Desde +Democracia estamos convencidos de que ninguna vida humana puede ser despojada de su esencia y de sus derechos. Los conflictos entre pueblos y naciones del Planeta no pueden optar por incluir la vía del sufrimiento de los civiles que se ven inmersos en los mismos y, desde el respeto a las resoluciones de Naciones Unidas, se deben encontrar vías de solución que no mercadeen con ninguna vida humana para su resolución, además de tener en cuenta el resto de los efectos que tienen sobre el territorio en clave económica, educacional, sanitaria y medioambiental.
El dolor ante el sufrimiento de civiles inocentes es un sentimiento compartido por una amplísima mayoría de ciudadanos, sea cual sea su opción ideológica. Los conflictos no resueltos y el paso del tiempo generan una capa de protección ante la insensibilidad de quienes optan por resolver los conflictos por la vía armada. Quienes deciden enviar a seres humanos a realizar acciones totalmente contrarias al espíritu de humanidad, solidaridad y compasión, nos abocan a todos a insensibilizarnos al sufrimiento ajeno y a dejar de empatizar con quienes sufren los efectos de esas decisiones ajenas.
Observamos desde +Democracia un proceso de expansión global de movimientos políticos escorados hacia el totalitarismo y, por ello, queremos manifestar nuestra disconformidad con las soluciones políticas que no se asienten en un diálogo continuado y que no cese hasta encontrar soluciones que respeten no sólo los derechos humanos, sino también nuestro derecho a habitar en paz nuestro Planeta.
La política se orienta a la consecución de poder para mejorar la vida de todos. Cuando sus dirigentes pierden ese norte, el ejercicio político se convierte en un cruento enfrentamiento que deja de percibir al oponente ideológico como un ser dotado de derechos humanos reconocidos universalmente. En ese momento, pierde su esencia y se convierte en excusa para justificar acciones que nada tienen que ver con la gobernanza y con la convivencia pacífica.
Por ello, desde +Democracia exigimos a las naciones del mundo que recuperen la acción política como aquella que permite superar las diferencias sin dejar a un lado el respeto hacia las personas y sin anteponer intereses geopolíticos a cualquier vida humana. El conflicto que actualmente se está viviendo en Israel y Palestina es otro ejemplo de conflicto armado enquistado por la falta de voluntad de encontrar soluciones que antepongan los derechos de las personas a las ansias de poder de quienes han perdido la humanidad en su toma de decisiones. No es el único lugar en el mundo que se enfrenta a la deshumanización de la política entre estados y naciones y es labor imprescindible de todos los organismos supranacionales el buscar las salidas no sólo para evitar los conflictos armados, sino también para evitar que se planteen situaciones en las que las vidas humanas de uno y otro bando tienen un valor diferente. Para la Paz no hay bandos, sólo una posición: la no violencia.
Materiales para comprender mejor el conflicto:
La paz es el único camino – José Enrique de Ayala en elDiario.es (publicado el 10 de octubre de 2023)
The War on Gaza and Israel’s Fascism Debate – Alberto Toscano en Verso (publicado el 19 de octubre de 2023)
Francesca Albanese, relatora especial de la ONU: “Israel opera como una dictadura militar”– Entrevista de Javier Biosca Azcoiti en elDiario.es (publicada el 27 de octubre de 2023)
Israel y el fascismo – Jorge Lago en InfoLibre (publicado el 29 de octubre de 2023)
Israel-Palestine crisis: Security Council calls for urgent, extended humanitarian pauses in Gaza – United Nations (publicada el 15 de noviembre de 2023)